Mar del Plata, 11 de marzo de 2021
Piazzolla: centenario del nacimiento de un marplatense orgulloso que es un artista universal
En el centenario de su nacimiento, aunque podemos concordar que Piazzolla es, en rigor, un artista universal. También podemos evocar, con orgullo, que es argentino; más aún, marplatense.
Nacido alrededor de las dos de la mañana del viernes 11 de marzo de 1921, en una casa ubicada en la calle Rivadavia 2527, Astor Pantaleón Piazzolla fue único hijo de Vicente Piazzolla y de su esposa, Asunta Manetti.
Su crianza en un suburbio de Brooklin, Nueva York, fue fundamental en su vida. Allí, se acercó al bandoneón, aprendió varios idiosmas, conoció y frecuentó a Carlos Gardel y estudió piano, también.
Su deseo, íntimo y lamentablemente incumplido, fue pasar sus últimos años en una casa sobre la costa, en el sur de su Mar del Plata querida, una ciudad donde pasó poco tiempo. Pero su vínculo con el origen se asentó más en lo afectivo. Muchos de sus recuerdos más atesorados tienen que ver con la familia, con la casa donde nació, con los primeros lugares donde tocó su tango tan peculiar y vanguardista.
Astor acompañó a los mejores, como cuando a los 19 años se incorporó a la orquesta de Aníbal Troilo.
En 1946 compuso su primer tango: “El Desbande”. Luego, crearía alrededor de 1.000 tangos y 44 bandas sonoras.
Desde los 70, su prestigio, reconocimiento y talento lo llevarían a recorrer el mundo en interminables giras. En la década del 80 ese prestigio seguiría incrementándose. Llegó a tocar en el Central Park de Nueva York, un momento muy movilizador por ser el lugar donde pasó buena parte de su infancia, donde colocó los primeros cimientos de su inquietud y talento artístico.
Mientras su prestigio se expandía alrededor del mundo, en 1988 es operado del corazón con un cuádruple bypass. A principios de 1989 formaría su último conjunto, el sexteto Nuevo Tango.
El 4 de agosto de 1990, sufre una trombosis cerebral, mientras se encontraba en París, deteriorando gravemente su salud, vuelto a Buenos Aires, fallece el 4 de julio de 1992 a los 71 años.
Sin embargo, los artistas universales como él son imperecederos. Su huella sigue marcando el camino sobre cómo afrontar una pasión y transformarla en estilo de vida: detalle, pasión, compromiso y búsqueda incesante e inclaudicable de la perfección.
Piazzolla es tango, es música, es un nombre propio transformado en referencia cultural y de sitios emblemáticos, en el país y en el mundo. Piazzolla es orgullosamente hijo pródigo de Mar del Plata.